Quito, 21 jul (EFE).- El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, calificó como una "infamia" la detención de una mujer emigrante ilegal ecuatoriana y su hija en Bélgica, y criticó el endurecimiento de las leyes migratorias en la Unión Europea (UE)."Con consternación vimos cómo la Unión Europea ha endurecido sus leyes migratorias, olvidándose de que ellos (los europeos) fueron de una región de emigrantes y que América Latina recibió millones de inmigrantes de Italia, de España, de los Países Bajos", entre otros, afirmó Correa en su habitual programa radial sabatino.
El jefe del Estado ecuatoriano, que realizó estudios universitarios en Bélgica, se lamentó de que los líderes de la UE hayan "endurecido las leyes" y "criminalizado la inmigración", así como de que en la actualidad, "por falta de documentos, se meta presos" a los inmigrantes.
Se refirió al caso de la ecuatoriana Ana Cajamarca y su hija Angélica, de 11 años, a las que visitó el miércoles pasado en una prisión cerca de Bruselas, durante una visita privada a Bélgica.
"¡Qué infamia, qué insulto a la dignidad humana! ¿Cómo se puede concebir que haya seres humanos ilegales y por eso se castigue con prisión?", se preguntó Correa.
"Estamos dispuestos a luchar por las reivindicaciones de nuestros compatriotas, pero no a ponernos de rodillas -para que nos den la caridad y traten bien a nuestra gente- ni a recibir estas humillaciones", dijo el jefe del Estado, que no explicó qué acciones tomará su gobierno para atender el caso.
Ahora, "más que nunca, a luchar por una patria donde ya nuestros compatriotas no tengan que dejarla y aguantar esas humillaciones como la que soporta nuestra compañera Ana Cajamarca", insistió Correa.
"¡Qué vergüenza para Europa y para Bélgica, país al que quiero tanto, que meta presos a madres de familia y niños por no tener documentos. No tenemos por qué aguantar esto!", enfatizó Correa.
El pronunciamiento del presidente ecuatoriano se da poco después de que unas 150 personas cavaron un túnel simbólico ante el centro de detención de inmigrantes sin papeles, próximo a Bruselas, para pedir la puesta en libertad de Cajamarca y su hija, retenidas y con una orden de expulsión desde hace dos semanas.
En declaraciones a Efe, el portavoz de la Unión de Defensa de los Sin Papeles, Gerardo Cornejo, afirmó que se trata de "un caso inhumano", en cuya protesta tomaron parte "unos 50 inmigrantes latinoamericanos y un buen número de ciudadanos belgas".
Cornejo reclamó al próximo gobierno belga "que se congelen las expulsiones de inmigrantes y que dejen de encerrar a la gente hasta que haya una verdadera ley de regularización de los sin papeles" en ese país europeo.
El jefe del Estado ecuatoriano, que realizó estudios universitarios en Bélgica, se lamentó de que los líderes de la UE hayan "endurecido las leyes" y "criminalizado la inmigración", así como de que en la actualidad, "por falta de documentos, se meta presos" a los inmigrantes.
Se refirió al caso de la ecuatoriana Ana Cajamarca y su hija Angélica, de 11 años, a las que visitó el miércoles pasado en una prisión cerca de Bruselas, durante una visita privada a Bélgica.
"¡Qué infamia, qué insulto a la dignidad humana! ¿Cómo se puede concebir que haya seres humanos ilegales y por eso se castigue con prisión?", se preguntó Correa.
"Estamos dispuestos a luchar por las reivindicaciones de nuestros compatriotas, pero no a ponernos de rodillas -para que nos den la caridad y traten bien a nuestra gente- ni a recibir estas humillaciones", dijo el jefe del Estado, que no explicó qué acciones tomará su gobierno para atender el caso.
Ahora, "más que nunca, a luchar por una patria donde ya nuestros compatriotas no tengan que dejarla y aguantar esas humillaciones como la que soporta nuestra compañera Ana Cajamarca", insistió Correa.
"¡Qué vergüenza para Europa y para Bélgica, país al que quiero tanto, que meta presos a madres de familia y niños por no tener documentos. No tenemos por qué aguantar esto!", enfatizó Correa.
El pronunciamiento del presidente ecuatoriano se da poco después de que unas 150 personas cavaron un túnel simbólico ante el centro de detención de inmigrantes sin papeles, próximo a Bruselas, para pedir la puesta en libertad de Cajamarca y su hija, retenidas y con una orden de expulsión desde hace dos semanas.
En declaraciones a Efe, el portavoz de la Unión de Defensa de los Sin Papeles, Gerardo Cornejo, afirmó que se trata de "un caso inhumano", en cuya protesta tomaron parte "unos 50 inmigrantes latinoamericanos y un buen número de ciudadanos belgas".
Cornejo reclamó al próximo gobierno belga "que se congelen las expulsiones de inmigrantes y que dejen de encerrar a la gente hasta que haya una verdadera ley de regularización de los sin papeles" en ese país europeo.
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